CUADRO FALLIDO

By PASION X EL LOBO

El técnico de River tenía en la cabeza a Mandiyú y lo asoció con Gimnasia de Jujuy. ¿Será la aguda coincidencia entre yú y juy?
Sigmund Freud hubiera dicho que es un conflicto que interfiere con un deseo interno o cadena de pensamientos inconscientes. Es posible que el deseo más fuerte de Diego Pablo Simeone sea enfrentar a un equipo que desapareció y que ahora, bajo el nombre: "Textil Mandiyú", juega el Torneo Argentino "B".
El Lobo contará para este partido -se jugará el domingo a las 18.40 por TyC Max- con el retorno de Daniel Ramasco y Héctor Desvaux, y es casi seguro que ambos esten desde el arranque. El salteño para contener en la mitad de la cancha y el santafecino para marcar el costado izquierdo, junto con los centrales Gabriel Loeschbor y Sebastián Rocco; por la otra banda continuará Ariel Franco.
Se especula con que River traiga un equipo alternativo, ya que estando en la última posición del torneo sin chances, es casi seguro que Simeone apueste a continuar en la Copa Sudamericana.
De modo que Gimnasia tendrá más jugadores de experiencia en cancha y además será local, sin agregar que el equipo se adaptó satisfactoriamente a la nueva disposición táctica con cuatro en el fondo y el medio, un enganche y un solo delantero.
El equipo de Omar Labruna careció, el último encuentro, de definición. David Ramírez tuvo sustanciales ocasiones que no concretó al igual que Juan Arraya, Ricky Gómez estuvo neutro y Walter Busse jugó primero contra sus nervios hasta que entró en ritmo, tarde.
Salga el equipo que salga, es hora de reabastecer la moral ganandole a un grande que viene débil, que no está bien. Está concentrado, pero en Guadalajara.
River será un toro herido en la plaza del 23 de agosto- con arbitraje de Diego Abal- y Gimnasia, con sus toreros deberá buscar la estocada final con la espada del ataque, la concentración y el oportunismo.

Ignacio Alabí.
 

PINCHARON Y CORTARON

By PASION X EL LOBO
Gimnasia continúa por un camino sin huella aproximandose al aislamiento de primera división, y es que volvió a ser derrotado como visitante ante Estudiantes de La Plata por 2 a 0 jugando un buen primer tiempo, pero replegandose innecesariamente en el complemento.
Con Juan Arraya como único referente de ataque definido, la vuelta al equipo de Gabriel Ramón (luego de diez meses sin jugar) y el debút en primera del salteño Walter Busse, el Lobo salió convencido de pelearle un triunfo al local, y llegó por arriba, con jugadas concretas en la zurda de David Ramírez y bien plantado en la mitad de la cancha enacausados por la fiereza de Diego Mateo.
Estudiantes se vio sorprendido ante los ataques visitantes y el primer tiempo terminó con la sensación de que los dirigidos por Omar Labruna estaban convencidos de poder ganar el partido, pero no fue la misma mentalidad la utilizada para jugar el segundo tiempo.
El Pincha, con Juan Sebastián Verón como cowboy, arrió en el fondo al equipo norteño, lo amedrentó; y con el visitante sin respuesta y agotado en todas sus líneas sufrió la primera caida. Verón tuvo el espacio suficiente cerca del vértice derecho del área y clavó un derechazo que pegó en el travesaño e ingresó botando hacia la red.
Unanimidad desmoralizadora de Gimnasia y quince minutos después del golazo de Verón, Mauro Boselli definió el juego empujando con derecha, debajo del arco.
Vienen siendo naturales los malos segundos tiempos del Lobo y es también genuina la ineficacia de los que tienen que meter la pelota dentro del arco.
Permanecer en primera es una conjunción de concentración, aptitud, actitud y eficacia. Gimnasia nunca logró, con este técnico, conseguir estos requisitos válidos para hacer al fútbol argentino una elite. Cada vez queda menos para ponerlo en práctica.

Ignacio Alabí.