OFRECER EL CORAZÓN

By PASION X EL LOBO
Aún después de la derrota ante River, el Lobo no puede preocuparse y sufrir porque las posibilidades de permanecer en primera se achican; el equipo sigue compitiendo en primera división y jugará ante Rosario Central para mantener viva la ilusión.
En el monumental, los puntos bajos no fueron muchos, tácticamente, pero apareció la indisciplina, que en definitiva, fue la que definó el triunfo del local.
El sábado en el 23 de agosto con arbitraje de Javier Collado volverá Nereo Fernández a la titularidad en Gimnasia y es posible que también lo haga Fabio Pieters suplantando a Daniel Ramasco, que también salió expulsado ante River.
Los restantes jugadores no son un misterio, seguramente retornará a la zaga central Gabriel Loeschbor formando línea de tres con Matías Cahais y Héctor Desvaux; en la mitad de la cancha no faltará Diego Mateo, ni Silvio Iuvalé y como carrileros Ricky Gómez jugará en paralelo con Walter Busse.
Pieters podría desempeñarse bien como enganche, y si no, Jorge Luna es la variante para unirse en paredes con Mauricio Ferradas y Diego Miranda, aunque no sería inoportuno probar al violinista, Pablo Calandria.
Central viene con mucha confianza desde la llegada del técnico Miguel Angel Russo, y el plantel rosarino tiene grandes jugadores y recambio, por eso habrá que tomar muchos recaudos con Milton Caraglio, Ezequiel y Cristian González.
Iván Moreno y Fabianesi podría jugar como enlace, los laterales, Alexis Danelón y Pablo Lima tienen proyección y gol, sin embargo, el punto endeble e irregular está debajo del arco, Jorge Broun lo representa.
¿Quién dijo que todo está perdido?. Si Fito Páez, hincha de Central, quiere demostrar que ante la adversidad todo se puede lograr, por qué no Gimnasia. Una cuchillada de fevor.

Ignacio Alabí
 

GAS FRAVA

By PASION X EL LOBO
Gastón Pezutti enloqueció y Daniel Ramasco reincidió; Gimnasia perdió en el Monumental con River por 1 a 0, está último en la tabla de promedios y perdió el fair play que lideraba este campeonato.
Cuando comenzó el partido, Gimnasia se paró bien en la cancha con tres en el fondo y con Diego Mateo y Ramasco se repartieron en quites, complementandose con Walter Busse que se hizo cargo de la distribución y la fineza entrando en campo contrario.
El Lobo comenzó muy bien, supo contener los ataques del local que intentó con Diego Buonanotte, Radamel Falcao y Mauro Díaz, pero cuando contraatacó fallaron sus delanteros, sobre todo Diego Miranda que estuvo destiempado; no supo aguantar la pelota arriba y estuvo lento, en consecuencia Mauricio Ferradas no tenía referencia.
Ricky Gómez tuvo un mal partido y por eso los ataques del visitante derivaban por la derecha y no existió la posibilidad de variar y sorprender, sin embargo, Gimnasia pudo marcar durante el primer tiempo y es por esto que el local se retiró silbado al término de la primera mitad.
Con el ingreso de Juan Arraya por el paraguayo Miranda, Gimnasia no ganó más velocidad y comenzó a quedarse. River aprovechó la gentileza, pero no encontraba la definición; sólo necesitó el ingreso de Marcelo Gallardo, pues el ex D.C United recibió con zurda un pase y con derecha habilitó a Falcao que definió entre Pezutti y Héctor Desvaux.
Gimnasia decayó, Arraya no supo aprovechar un centro de Gómez en el punto del penal y con la primera expulsión de su arquero le cedió más la pelota a River y además perdió a su capitán cuando faltaba un minuto para el final.
La amenaza que fue Gimnasia en el primer tiempo se desdibujó con inmadureces, actos que deberían suprimirse desde antes de entrar a la cancha. Errores tenemos todos, los hombres se hacen reconociéndolos. Tranquilidad Gimnasia, tensa tranquilidad.

Ignacio Alabí