HASTA LA VICTORIA, A VECES...

By PASION X EL LOBO
Luego de seis partidos sin perder como local, Gimnasia cayó ante Arsenal por 1 a 0 y jugó un partido malo; no supo por dónde atacar y le convirtieron por una falta innecesaria, cometida por Gabriel Loeschbor, a seis metros de la media luna.
El partido fue feo, no hubieron muchas llegadas a los arcos y y cada vez que el lobo tenía esa posibilidad, Juan Arraya no estuvo preciso para definir o asistir.
Arsenal no hizo mucho para quedarse con el triunfo, pero aprovechó a Luciano Leguizamón que ejecutó un exquisito tiro libre en la mitad del complemento y con eso le alcanzó a los dirigidos por Daniel Garnero para esperar de contra y defender el triunfo parcial que culminó en final.
Gimnasia sintió la ausencia de César Carranza, ya que no había enlace entre los delanteros y los volantes, y es eso lo que el petiso sabe hacer cuando la pelota no llega limpia al pié de los delanteros.
Se derrumbó la imagen férrea de el equipo imbatible en su cancha, pero esta se vislumbró ante Banfield cuando el equipo ganó sin haberlo elaborado.
Vehemencia o demencia para enfrentar al próximo rival. Se puede recuperar el quiebre.


Ignacio Alabí
 

PROBABILIDAD DE LLUVIA

By PASION X EL LOBO
El último partido entre Gimnasia y Arsenal terminó con seis goles, y ante este rival, el Lobo archivó su mayor goleada histórica en Primera División (5 a 2 en Sarandí); en consecuencia, el radar ubicado en el Cerro Chañi, arroja posibilidades de numerosos goles convertidos, no espicifica si por errores o buen juego, pero sí se vaticina un buen espectáculo.
El sábado en el 23 de agosto a las 19.20 (hora oficial) con arbitraje de Javier Collado, Gimnasia intentará seguir ganando como local y despegarse en el historial que iguala en partidos ganados con Arsenal de Sarandí (2 triunfos cada uno).
El equipo de Omar Labruna, con la ausencia por varias fechas de César Carranza por un desgarro, afrontará el partido ante los de Daniel Garnero con cambio de esquema, respecto del equipo que enfrentó a San Lorenzo, y el ingreso de David Ramírez por Diego Mateo. El Lobo saldrá a la cancha con enganche y dos puntas.
Los del Viaducto repetirán el mismo equipo que cayó ante Boca; es decir que el once inicial incluirá a Alejandro Gómez desbordando y armando juego, Luciano Leguizamón, movedizo con gran pegada y dominio de pelota y Cristian Pellerano de exigente marca y tiro de media distancia.
Quizás el punto débil del visitante sea la austeridad, sobre todo siendo riguroso en conservar el empate. Esto puede llevarlos a entregar un campo para que el local arremeta y convierta por inercia. No hay defensa que resista la intensidad del ataque impulsado por los gritos y murmullos de la hinchada
El Lobo ya es temido en su tierra y cada triunfo en el 23 de agosto es un punto en contra para cada rival que se acerque a la tierra del carnavalito.
Ruge el cielo en la Tacita de Plata.


Ignacio Alabí